A veces nuestro presupuesto no nos permite realizar una reforma integral de nuestra cosa, por lo que cada vez es más habitual reformar la casa por fases. En este caso, el aspecto más importante es la planificación, así que en este artículo vamos a darte algunas claves para que aprendas a hacerlo y tu reforma sea un éxito.
La principal ventaja de reformar una casa por fases es la posibilidad de distribuir el dinero de forma responsable y darte tiempo a ahorrar más para la siguiente fase. Sin embargo, el principal inconveniente es que los tiempos se alargan mucho y las reformas suelen ser algo tediosas para compaginar con la rutina diaria de la familia. Así que consejo número uno: paciencia.
1. Aunque vayas a reformar por fases, planifica la reforma general
Planificar la reforma integral de tu casa te ayudará a marcar las distintas fases y establecer prioridades. Así, puedes planificar la reforma por estancias e ir cerrando fases con zonas de la casa ya completadas. Por ejemplo, la cocina o el baño para poder usarlos ya una vez los hayas reformado.
2. Ten claras las fases más urgentes
Puedes vivir un tiempo sin los acabados definitivos o los detalles decorativos pero no puedes avanzar en la reforma sin antes solucionar posibles problemas estructurales como grietas, filtraciones o refuerzo de estructuras.
Los sistemas de fontanería y eléctricos también deben ser prioritarios y formar parte de las primeras fases de tu reforma. Ten esto en cuenta a la hora de organizarte para que todo vaya sobre ruedas.
3. Las cocinas modulares agilizan la reforma
La cocina es una de las estancias imprescindibles para empezar a vivir en un hogar por lo que cuanto más facilidades pongas a esta fase de la reforma, antes podrás instalarte. Las cocinas modulares permiten crear distintas composiciones que incluso puedes acabar de decorar en el futuro. Por ejemplo, puedes reformar la estructura base de tu cocina y dejar la elección de colores para más adelante, cuando ya hayas reformado otras fases más urgentes.
4. Apuesta por los espacios diáfanos
Una distribución diáfana ahorra tiempo y es más económica ya que evita la construcción de particiones o pareces adicionales, así como puertas.
Eso sí, ten en cuenta que si optas por un diseño diáfano y dejas el acabado de las paredes o el pavimento para una fase más avanzada, la obra estará siempre a la vista y puede generarte estrés.
5. Las soluciones en seco serán tus aliadas
Con las soluciones en seco evitarás cemento, arena, agua y tiempos de secado. La reforma será más rápida pero también más limpia. Además te permite cambiar de idea a la hora de realizar divisiones en las estancias aunque ya hayas avanzado en la reforma.
6. Opta por un pavimento de madera maciza sobre rastreles
Así puedes dejar listas las instalaciones de agua, calefacción y aislamiento por debajo y cerrar provisionalmente el suelo con tableros para más adelante hacer la inversión en la tarima de madera que más se adapte a tus necesidades.
7. Define espacios provisionales
Independiza y deja fuera de la vista zonas que vas a necesitar para el uso diario como la cocina. Utiliza puertas provisionales o cortinas. También la puedes situar en una plataforma que oculte las instalaciones.
8. Asume el contraste de materiales por un tiempo
Es habitual que el contraste entre materiales antiguos y nuevos nos genera cierto desasosiego en el hogar, por lo que diferenciarlos de forma clara puede ayudar a estar más cómodo en el hogar mientras se esté realizando la reforma.
Así, recomendamos comprar todos los materiales de estructura como pavimentos, revestimientos, sanitarios o encimeras de una sola vez para que las partidas no varíen y corras el riesgo de ralentizar la reforma.
Si estás pensando en reformar tu casa, contacta con nosotros y te ayudaremos a encontrar la mejor solución para tu hogar.
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